Ridley Scott tuvo la genial idea de volver por el camino de Alien y sacar una serie de precuelas (sí, será una trilogía) para intentar sacar el máximo dinero al espectador. Todo esto después de una serie de películas que no resultaron ser tan buenas como se presuponía.
Los fans se tiraban de los pelos y dudaban del proyecto. Y no es para menos, sobre todo después de las inferiores secuelas de Alien: Alien 3 y Alien Resurrección. Si además le sumas que contrató de guionista a uno de los que realizó Lost, la serie con el final más confuso y provocativo de la historia.
En Prometheus un grupo de científicos y exploradores emprende un viaje espacial a un remoto planeta, una rara estrella recién descubierta, donde sus límites físicos y mentales serán puestos a prueba. El motivo de la misión es que los humanos creen que allá podrán encontrar la respuesta a las preguntas más profundas y al mayor de los misterios: el origen de la vida en la Tierra.
Después de ver la película no siento mas que una desilusión enorme. En primer lugar con la manía de remover de nueva una saga muy buena, con dos de las mejores películas de ciencia ficción de la historia, y con un reconocimiento mundial y consagrado. En segundo lugar no puedo sino aumentar las ansias de decirle a Ridley Scott que en qué mierdas está pensando para contratar a Lindelof como guionista, con unos fallos argumentales brutales e insultantes para el espectador.
A partir de ahora voy a comenzar a soltar una tira de SPOILERS, por tanto la gente que quiera ver la película que evite leer esto o veréis destripada prácticamente toda la obra.
Empecemos por la pareja biólogo-geólogo que protagonizan la escena más insultante de todas. Resulta que la expedición se propone analizar y estudiar una obra arquitectónica impresionante que acaban de descubrir, y al entrar en el "edificio" esta pareja sufre un miedo escénico y decide abandonarlos. ¿Cómo me voy a quedar con quince compañeros que, si pasa algo, podemos defendernos? Mejor pirarnos de aquí y volver los dos solitos a la nave. Tras esto se pierden (el geólogo, que es cartógrafo de planos), y eso que no habían recorrido un laberinto, simplemente dos callejones. Al rato llegan a una sala peculiar llena de unos supositorios gigantes y se encuentran a un bicho raro, extraño y que no parece bueno precisamente. Al magnífico biólogo (recordemos que estaba cagado, pero se ve que no tanto) no se le ocurre otra idea que acercarse a tocarlo porque: "¡Es tan bonito!" y claro, pues pasa lo pasa y acaba matándolo. ¿Qué clase de imbécil ha contratado a estos retrasados para una expedición de un millón de dólares?
Otra escena está protagonizada por Charlie Holloway, un científico. Resulta que a través de una treta que le gasta Michael Fassbender acaba contaminado por el líquido que da vida a los humanos (o algo parecido). Pues bien, al día siguiente de esto se levanta y tiene los ojos extraños, se acerca al espejo y observa a un bichito en su ojo que se mete para dentro del organismo. Ahí piensas: "Es científico, seguro que ahora lo cuenta y lo dejan en observación o algo", pues NO. Se lo calla y se lo llevan a la expedición y claro, al rato está delirando y se lo cargan (por abreviar la historia).
Luego resulta que la protagonista, interpretada por Noomi Rapace, está embarazada de un bichejo raro debido a una serie de cosas (ved la película y lo sabréis). Pues bien, ella misma se dirige hacia una cápsula que opera a la gente y realiza una cesárea para sacarse ese ser extraño. Pero lo curioso no es esto, sino que la cápsula está fabricada solo para hombres (¿por qué?, no lo sabemos ni lo sabremos) y ella, como buena médica que es (mentira) se las ingenia para engañar a un aparato de millones de dólares inventándose una operación que resulta que es igual que la cesárea. Aceptamos pulpo. Pero después de la extracción, por si fuera poco, se pega una carrera por la nave sin prácticamente resentirse. Pero hija mía, ¡que te acabas de operar! Eso sí, cuando ya ha pasado un buen rato largo se resiente (¿pero recién operada no, verdad?)
Otra escena mítica es cuando el geólogo vuelve (sí, el retrasado que se pierde). Pues bien, a este individuo le cayó un ácido y después entró en contacto con el líquido negro (que no se sabe qué es exactamente). Y cuando vuelve a la nave de la expedición, ¿qué hacen? Cualquiera pensaría que primero verían porqué ha vuelto y qué ha pasado. Pues no, abren las compuertas así a piñón (cuando al científico infectado por el bicho del ojo se lo cargan sin preguntar) y resulta que se ha convertido en una especie de superhombre y mata a una decena de hombres sin despeinarse hasta que llega un tripulante con un lanzallamas. ¿Por qué cojones al científico lo quemáis sin preguntar y a este le dejáis entrar como Pedro por su casa? Y peor aún, ¿qué mierda tiene el líquido negro que a uno le genera una especie interior y a otro lo convierte en el mismísimo Hellboy? ¿no se supone que a todos debe afectar igual? No os preocupéis, que no cuentan el porqué. Es solo una de las millones de incógnitas que genera la película.
Seguro que me dejo algunas otras escenas absurdas, pero no me apetece pensar más en semejante despropósito. Me han entrado unas ganas de ver otra vez las películas de Alien... (y lo voy a hacer muy prontito), a ver si consigo olvidarme de este absurdo.
Se me olvidaba. Al final de la película sale un Alien, para hacer ver que hay relación (30 segundos, no os penséis que sale más). Esperemos que la segunda y tercera parte sean mejores, ya que transcurren en otro lado, aunque la cantidad de incógnitas que ha acabado generando esta película dudo que se sepan algún día.
Concluyendo, película con efectos brutales y sonido apabullante. De los peores guiones de superproducciones que he podido ver, nefasto, pésimo e insultante. Afortunadamente Ridley se ha cargado al guionista para las sucesivas películas. Si le tenéis algo de amor a Alien no la veáis, o simplemente pensad que estáis en otra cosa y olvidaos de los guiños que aparecen.
Mi nota: 3/10
PD: Charlize Theron está tremenda. No envejece esta mujer.
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